Quiénes se benefician con la madera talada en la carretera Nuevo Edén-Shipetiari

La construcción de la carretera Nuevo Edén-Shipetiari de 20 metros de ancho por parte del Gobierno Regional de Madre de Dios sin respetar la normatividad legal vigente, ha significado la comisión de varios delitos, entre ellos la tala ilegal de madera en bosques primarios por la zona de amortiguamiento de la Reserva Comunal Amarakaeri.

En dicho tramo ya se observa tablares de madera. La pregunta que tiene que responder el gobierno regional es: cuál es el destino de dicha madera teniendo en cuenta que se ha arrasado con varias hectáreas de bosque y quiénes se han beneficiado con ella, considerando que sobre estos bosque hay grandes intereses económicos.

El pasado 17 de setiembre, FENAMAD ya puso en conocimiento y advirtió de estas irregularidades a Contraloría General de la República, Congreso, Defensoría del Pueblo y otras.

En la misiva, se informa que la ejecución del mencionado proyecto vial no cuenta con los informes favorables de los entes involucrados como el Ministerio de Cultura, Ministerio del Ambiente, Sernanp y otros y tampoco con el expediente técnico lo que es un hecho de flagrante violación a la propia normativa del Estado y a la consulta previa a los pueblos que se verían afectados por esta medida.

FENAMAD señala que si dicho proyecto no cuenta con expediente técnico, tampoco tiene presupuesto para su ejecución, por lo que ha solicitado la intervención de la Contraloría General para que fiscalice el uso de los recursos del gobierno regional de Madre de Dios, tal como lo manda el art. 199 de la Constitución Política del Estado.

Felizmente ante este requerimiento, personal de la Contraloría ya visitó las oficinas de la Jefatura de la Reserva Comunal Amarakaeri del Sernanp con el fin de solicitar información sobre el área natural protegida y la ejecución del proyecto.

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